Sobre La Persecución

Desde 1999, el régimen comunista chino ha perseguido brutalmente a los practicantes de Falun Dafa, encarcelando a cientos de miles de practicantes, torturándolos física y psicológicamente en un intento de forzarlos a renunciar a sus creencias. La intensidad de esta persecución es sorprendente, considerando el amplio apoyo gubernamental que obtuvo Falun Gong a principios de los años 90. El motivo probablemente se debió a que en 1999 las estadísticas oficiales estimaron que más de 70 millones de personas practicaban Falun Dafa, mientras que los miembros del Partido Comunista Chino registraban 65 millones. A pesar de la historia apolítica de Falun Dafa, su popularidad y su filosofía espiritual independiente incomodó al régimen chino de ideología ateísta.